Loreto Letanía
Madre de la
Divina Gracia
MADRE DE LA DIVINA GRACIA
El Arcángel San Gabriel saludó a María diciéndole: "llena de gracia", por
lo tanto, es de fe que al realizarse en Ella el Misterio de la Encarnación del Verbo, estaba PLENA DE GRACIA.
Pero ... desde aquel instante creció MÁS en Ella la GRACIA..
Plena quiere decir completa, llena, pero se usa
este término para resaltar aquello de lo que se está hablando, en este
sentido se dice que María estaba PLENA DE GRACIA, llena, pero en su vida
el momento central o culmen es el de la Encarnación del Verbo y desde
entonces en Ella continuó aumentando la GRACIA ... en PLENITUD.
La
Santidad de Jesús, cuánto aprovechó a Su Madre que con tanta atención
recibía y conservaba en su corazón las palabras y los actos de su Divino
Hijo.
El formó la Santidad de su Madre, tan próxima a la suya cuanto es posible en una pura criatura y la elevó a un grado altísimo, más alto, sin comparación, que el de todos los elegidos, de todos los santos.
Llena de Gracia, ninguna hay que Ella no pueda obtener.
Cristo es el
MANANTIAL de la GRACIA y su MADRE SANTÍSIMA es como un depósito, un
recipiente (que recibe), de dónde por su intercesión alcanzamos gracias
... y al Autor de la GRACIA.
CRISTO, MANANTIAL DE LA DIVINA GRACIA.
MARIA, MADRE DE CRISTO MADRE DE LA DIVINA GRACIA.
MADRE PURÍSIMA
Lo que manifestamos creer y atribuimos a María con este título, es la
total y perfecta exención de toda sombra de culpa y defecto.
Pureza
excepcional, integridad de vida que no la tiene igual ni semejante, nadie
más.
El Pontífice San León escribe que en las diversas vicisitudes
de la vida, no hay, ni aún la persona más perfecta, que de vez en cuando
no se manche con el polvo de la tierra.
En Proverbios (24.16) dice que 7
veces cae el justo ... caídas ligeras y veniales pero ... son caídas.
Únicamente en María nada que sea mancha se encuentra en Ella,
Sea bendita, la Santa Inmaculada Concepción de la Santísima, Virgen María